El fin de semana se llevó a cabo la reunión del Puesto de Mando Unificado, PMU, de Gestión del Riesgo, convocado luego de decretada la alerta roja hospitalaria en el Quindío y que determinó una serie de acciones, con el fin de contener el avance de contagios por coronavirus en la región.

Con la presencia de la gobernadora encargada Paula Andrea Huertas Arcila, acompañada de los secretarios del Interior y Salud, la Policía, Ejército, Cruz Roja y Defensa Civil, entre otros organismos, se conoció un informe de las autoridades de salud que dio cuenta del avance constante y preocupante en el número de contagios y la mortalidad que ello está generando, siete decesos en promedio por día, además de la alta ocupación de Unidades de Cuidados Intensivos, UCI, la cual sigue determinando la alerta hospitalaria.

Allí se solicitaron acciones más drásticas para hacer frente a la situación y particularmente durante las fechas de Navidad y fin de año que se acercan, motivo por el cual fue convocado el Consejo Ampliado de Seguridad para este lunes en horas de la tarde.

Igualmente, se coincidió en apoyar las medidas que implica la alerta roja, en el sentido de mantener suspendidos los procesos quirúrgicos que implican ocupación de UCI, insistir ante comunidad y alcaldes para verificar el cumplimiento de las normas de bioseguridad y la estricta aplicación de la reglamentación sanitaria.

De la misma manera, se determinó restringir en su totalidad los eventos masivos, solicitar planes de contingencia a las IPS y a las EAPB para el manejo de la situación y fortalecer los procesos de captación, así mismo implementar planes desde los municipios con más alta afectación y evaluar de nuevo como posibilidad el pico y cédula para la movilidad en el Quindío.